Hacer fiesta con la tortura y el sufrimiento hacia los animales

El diputado de Los Verdes, Joan Oms, ha presentado una pregunta parlamentaria en la que denuncia el maltrato animal, que se lleva a cabo en multitud de fiestas populares del territorio español, y pregunta si el Gobierno va a recomendar la suspensión de estas prácticas

8-Octubre-2007 Nota de prensa de la oficina del diputado Joan Oms

Oficina Parlamentaria de Los Verdes

A LA MESA DEL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS

MOTIVACIÓN

Por desgracia son muchos los lugares donde las fiestas y conmemoraciones populares siguen incluyendo “espectáculos” que consisten en el maltrato, la degradación, la tortura y la muerte de animales.

Ya no hablemos de la denominada “Fiesta Nacional” que incluye como ingrediente básico el maltrato múltiple progresivo de un Toro hasta la muerte, que culmina, si la “faena” ha sido buena, con el corte de las orejas y el rabo para su exhibición como trofeo victorioso por el aplaudido torero. Algún día habrá que entrar a fondo en eso y de cómo podemos seguir manteniendo un estandarte cultural tan degradante.

Ahora, se trata de ponderar el hecho de que en fiestas “populares” se tiren cabras de campanarios, se agarren patos y gallinas como colgantes para personas, se enciendan con bolas de fuego los cuernos de un toro hasta su desesperación, se cuelguen galgos por el cuello dejando que rocen el suelo con los pies para ”prolongar su agonía” en lo que se llama el “galgo secretaria” (parece picar a máquina en el suelo) o se les hace morir de inanición, o se suelta un toro como en Tordesillas para lancearlo durante horas hasta la muerte, o se celebre la fiesta de la Becerradas en Algemesí soltando, una a una, 5 becerrillas para ser toreadas primero por el ganador de un concurso macabro y a continuación sometida a arponazos por toda la gente durante horas y gritos desgarradores hasta una agonía larga y cruel con agujeros por todo el cuerpo….y podríamos citar mas.

Todo ello con la autorización de las autoridades locales y de comunidad y con su propia asistencia a los actos, en los que participan o contemplan los hechos también niños de todas las edades.

Es sabido que en la nueva redacción del código penal en trámite se dice: “Los que directamente o en espectáculos no autorizados legalmente, maltraten con ensañamiento e injustificadamente a animales domésticos causándoles la muerte o provocándoles lesiones que produzcan un menoscabo físico serán castigados con la pena de prisión de tres meses a un año de inhabilitación especial y de uno a tres años para el ejercicio de profesión, oficio o comercio que tenga relación con animales”. Una redacción que queda corta en relación a enmiendas que defienden que sea delito con penas de uno a tres años el maltrato, la tortura y la muerte de animales pero que claramente contempla como delito con pena esas conductas…

Por todo lo anterior es por lo que se formula la siguiente pregunta:

¿Va a permanecer pasivo el Gobierno ante la autorización de espectáculos públicos degradantes, de maltrato, tortura y muerte de animales, con el agravante de la presencia de autoridades, amparando el hecho, la difusión y participación de menores en ellos?
¿Piensa el Gobierno proceder a recomendar la suspensión de estos actos ante las autoridades que los legalizan y permiten?
¿Piensa el Gobierno suprimir la frase de “en espectáculos autorizados legalmente” para actuaciones que comporten degradación, tortura y muerte de animales?

EL DIPUTADO Joan Oms i Llohis

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